La controversia ha acompañado a la pobre Manon desde que el Abate Prévost creara el personaje en 1728 y lo diera a conocer como ‘Historia del Caballero Des Grieux y de Manon Lescaut’. Prohibida en Francia tras su publicación, el Parlamento de París decidió que no había mejor forma de purificar a la descarriada que mandando la novela a la hoguera. Sirvió de poco porque para entonces el título circulaba de mano en mano en ediciones privadas que se distribuyeron secretamente antes de que un torrente de reimpresiones la convirtieran en el libro más reeditado de la literatura francesa del siglo XIX. Andando el tiempo, el argumento daría lugar a una docena de películas, varias series de televisión y cuatro óperas firmadas por Massenet, François Auber, Puccini y Hans Werner Henze, cada una de ellas adaptada en innumerables escenificaciones. Una de ellas está firmada por el francés Vincent Huget. En ella se fija estos días el Palau de les Arts de Valencia que la presenta de la mano de soprano americana de origen cubano Lisette Oropesa quien recibió el miércoles el reconocimiento como mejor cantante femenina en la gala de los International Opera Awards, el tenor neoyorquino Charles Castronovo y el apoyo del director musical del teatro James Gaffigan. La ‘Manon’ de Huguet nació de manera atropellada. Pensada para su estreno en la Opéra Bastille en 2020, sufrió de inmediato las consecuencias de una huelga y la aparición del coronavirus. Las primeras representaciones se hicieron sin público con el fin de hacer el registro audivisual para una transmisión posterior. Manon renacería convertida en mujer fatal en el paisaje de los felices años veinte. Era una forma de hacer creíble el personaje más allá de su máscara original y dieciochesca, de los polvos blancos, las pelucas, las cejas perfiladas y las mejillas enrojecidas. Y así, con look atrevido, camina Manon por el Palau de les Arts: atravesando calles de arquitectura modernista y siendo todavía alguien sencillo frente a la magnificencia de una posible Joséphine Baker a la que recibe sobre alfombra roja un coro de figurantes enfervorecido; viviendo modestamente con Des Grieux en un habitáculo que podría ser la trastienda de un museo; pavoneándose en una fiesta con vestidos de mil colores y deslumbrante falsedad, y muriendo finalmente en la soledad de un escenario desubicado y sintético. El tránsito de lo figurativo a lo esencial, en una producción que tiene algo de artificio, trata de exponer ante los espectadores la razón de ser de su comportamiento, siempre ligado a la búsqueda de la felicidad. Quizá este es el concepto más recurrente en el libreto de Henri Meilhac y Philippe Gille, y la razón de que se admire al personaje desde que el Abate Prévost lo imaginara. Manon es un ser frágil, encantador, más juguetón que endiablado , menos consistente de lo que aparenta. Mujer de mala vida porque en ello radica su rebeldía. Vincent trata de explicarlo dirigiendo el zoom de su producción hacia lo sentimental y dejando en un segundo plano el hecho de que la indisciplina sea una forma de contrarrestar un paisanaje hipócritamente moral. Muerta la resistencia queda lo conmovedor. Porque no es menor el hecho de que ‘Manon’ de Massenet derive buena parte de su fama al conglomerado de bellas melodías que aquí es escuchan muy bien perfiladas por Lisette Oropesa, protagonista absoluta de la reposición. Puestos a elegir un matiz de su actuación merecería la pena destacar la facilidad con la que describe el personaje desde la ingenua alegría de su ‘Je suis encore tout étourdie’, pasando por el reflexivo lamento en ‘Adieu, notre petite table’, tan dulcemente expresado; la nobleza de sus arrogantes agudos en ‘Je marche sur tous les chemins’, y la candidez de su despedida final. Oropesa canta en Valencia su primera Manon europea tras la apoteosis de su presentación en el Metropolitan de Nueva York . Las importantes exigencias vocales del papel tienen respuesta en la facilidad de emisión, la calidad de las medias voces, la delicadeza de los efectos y el dominio del registro agudo. En un concepto eminentemente dulce. Parte decisiva en la interpretación es el impulso que añade el director James Gaffigan, quien sabe bien lo que tiene entre manos. En 2022 se responsabilizó de la reposición tras el descalabro inicial. Ahora, en Valencia cuenta con la vibrante respuesta de la orquesta titular, sin duda uno de los cimientos artísticos del Palau de les Arts. Y Gaffigan se une a ellos dejando que el foso sea un torrente sonoro, ajeno a las idealizaciones dieciochescas implícitas en la partitura de Massenet y a otros refinamientos románticos. Gaffigan mira a ‘Manon’ de frente, construyendo una versión robusta y honrada, que desmitifica su propia naturaleza y convierte la obra en un objeto que se desenvuelve sin cortapisas. Es curiosa la facilidad con la que fluye en este contexto de magnificencia musical el interludio musical entre los actos primero y segundo (no tanto entre el cuarto y el quinto) basado en ‘C’est lui’, canción de Georges Van Parys y Roger Bernstein a cargo de Joséphine Baker en la película ‘Zouzou’ (1934). Por lo demás, acompañan a Oropesa un reparto suficientemente armado. El tenor Charles Castrono tiene un lugar destacado como caballero de Grieux. A veces demostrando una fortaleza admirable, especialmente en el registro agudo, y proponiendo notables medias voces. Su versión es irregular porque su voz le obliga a reconstruirse continuamente, sometiéndole a una expresividad algo quebrada y a una emisión no siempre bien templada. El barítono catalán Carles Pachon defiende con presencia y emisión correcta a Lescaut, primo de la protagonista. El bajo norteamericano James Cresswell ofrece una versión robusta del conde des Grieux, el padre. Finalmente, Jorge Rodríguez-Norton dibuja con afectación al noble libertino Guillot de Morfortaine, saludable disposición vocal y una buena pronunciación. Todos ellos y otros tantos intérpretes, además del siempre poderoso Cor de la Generalitat Valenciana son agentes imprescindibles en la consecución del éxito que tuvo la primera representación del jueves. Seguirán otras cuatro hasta el 15 de octubre.
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Author : (abc)
Publish date : 2024-10-04 17:19:45
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