El término rumiación hace referencia al acto de masticar por segunda vez, volviéndolo a la boca, un alimento que ya estuvo alojado en un depósito que algunos animales tienen precisamente para este fin. Esta doble masticación es precisamente lo que suele hacerse en el caso de los pensamientos repetitivos pues, de alguna manera, esa persona los rumia una y otra vez en lugar de digerirlos y asimilarlos. Según explica Laura Palomares, directora de Avance Psicólogos , esta tendencia a dar vueltas y vueltas a los mismos pensamientos de forma repetitiva es lo que se conoce como el «síndrome de rumiación».