Iba a ser a mediados de enero en Londres, pero la apretada agenda del fútbol, saturada de partidos y saraos, obligó a la FIFA a cambiar sus planes, improvisar y adelantar la entrega de los premios The Best en Doha , donde este miércoles se disputa la final de la Copa Intercontinental entre el Real Madrid y el Pachuca. En una gala celebrada en la Aspire Academy, con una duración de menos de una hora, encajada en la cena oficial de los finalistas del torneo, y en la que una de las dos presentadoras fue la periodista española Cristina Gullón , comunicadora de Real Madrid TV, Vinicius fue nombrado el mejor jugador del mundo. Mes y medio después del sofocón del Balón de Oro, el brasileño se llevó el segundo trofeo individual más importante del planeta fútbol. Vestido con traje negro, camisa blanca y corbata oscura, el brasileño recibió el premio de manos de Gianni Infantino, que le acogió con un caluroso abrazo y un par de besos. Luego, Vini miró el trofeo como quien mira a su primer amor y pronunció un pequeño discurso en portugués, su lengua materna: «Este premio estaba tan lejos que parecía imposible llegar hasta aquí. Pienso en mi infancia, jugando en Sao Gonçalo, rodeado de pobreza y crimen, pero eso muestra que en estas circunstancias también es posible llegar aquí. Mi familia dejó de vivir sus sueños para que yo viviera el mío. Quiero dar las gracias a todos los que me han votado, entrenadores, jugadores y periodistas También se las doy a Florentino, a José Ángel y a Carletto. Quiero seguir jugando en el Real Madrid muchos años. Es el mejor club del mundo. Por último, no quiero olvidarme del Flamengo, que me dio la oportunidad en Brasil, también de mis compañeros de la selección brasileña y de mi país, que me han dado mucha fuerza para estar aquí». Vinicius fue uno de los seis madridistas premiados en Doha . Antes que el brasileño subiera al escenario a recoger su galardón, lo hizo Carlo Ancelotti, que ya se llevó el Balón de Oro a mejor entrenador de la pasada temporada, y también fue el más votado en The Best. El italiano recibió el premio de manos de Arsène Wenger: «Quiero compartir este premio con mis jugadores, que no siempre, pero a veces me escuchan. Lo comparto también con mi familia y con mi mujer, que me apoya con paz y amor y eso es importante para nuestro trabajo. Llevo 48 años en el fútbol, y he vivido muchas emociones, a veces positivas y a veces negativas. Pero esas emociones son las que me mantienen vivo en este deporte», dijo un Ancelotti sonriente y feliz, vestido también con traje oscuro y camisa blanca. Tanto entrenador como jugador salieron directamente del estadio Lusail, donde acaban de terminar el entrenamiento, para dirigirse a la Aspire Academy y recoger su premio. Una vez cumplido el protocolo, ambos se marcharon al hotel de concentración para cenar junto al resto de jugadores y miembros del staff. En 24 horas se juegan un título y no había tiempo para celebraciones más profundas. La traca final de un The Best de claro color blanco y sabor a merengue lo pusieron Carvajal, Rudiger, Kroos, Bellingham y, de nuevo, Vinicius . Hasta cinco jugadores del Real Madrid fueron incluidos en el once del año, un once entre los que también estaban los españoles Rodri y Lamine, aparte del lateral blanco, que sigue en Madrid con el proceso de recuperación de su rodilla derecha, gravemente lesionada ante Osasuna hace un par de meses. El premio The Best tiene un procedimiento y unos votantes distintos a los del Balón de Oro. Si en el galardón de France Football y UEFA el ganador lo deciden 100 periodistas de los 100 primeros países en el ranking mundial, en The Best el espectro es bastante más amplio. Votan los seleccionadores y capitanes de las selecciones, un periodista de cada país miembro de la FIFA y los aficionados a través de la página web del ente dirigido por Infantino. Y solo pueden votar tres de los diez finalistas, con cinco, tres y un punto respectivamente. Durante el periodo de 2010 a 2016, ambos premios unieron fuerzas y se fusionaron en uno, pero las críticas a esta asociación, la polémica que generaban las votaciones y los intereses económicos de ambas partes provocaron que solo seis años después ambos volvieran a separar sus caminos, una ruptura que no ha evitado el ruido de unos premios que año tras año siguen llenando tertulias y debates, como una vez ha quedado evidenciado en este 2024. Rodri fue el Balón de Oro y Vinicius el The Best . Y la noria del fútbol sigue girando. Ya saben, ‘The show must go on’.
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Author : (abc)
Publish date : 2024-12-17 18:25:04
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