«Si eres una mujer fuerte/protégete de las alimañas que querrán/almorzar tu corazón» . Estos son los primeros versos del poema con el que Gioconda Belli (Managua, Nicaragua, 1948) arranca ‘Rebeliones y revelaciones’, libro en el que recoge toda su trayectoria vital y literaria, pero también puede ser el lema de lo que ha sido su vida y la de muchas mujeres que, como ella, han tenido que luchar literal y metafóricamente contra las adversidades. Este sábado la poeta y novelista nicaragüense estará en Toledo para compartir café y palabras con Begoña Dorado del Águila y con sus lectores, en un acto organizado por la Asociación de Libreros de Toledo, a las 17.30 en el Hotel Eugenia de Montijo . Allí llegará con su última novela debajo del brazo, ‘Un silencio lleno de murmullos’ (Seix Barral, 2024), donde narra el recuento vital que una hija hace del pasado de su madre, Valeria, una luchadora sandinista que, decepcionada de la revolución, abandona Nicaragua, se casa en Madrid y termina muriendo sola en la capital española. La hija, Penélope, viaja después hasta allí para encargarse del funeral y de paso vender la casa de su progenitora. Pero entonces se dan los primeros casos de la pandemia del coronavirus y se encuentra encerrada en el hogar materno, donde aprenderá en cierto modo a conocer todos los entresijos de una madre a la que termina admirando después de haberse sentido un tanto ausente de ella. -Todas las novelas tienen algo o mucho de autobiográfico. Pero, la última, ‘Un silencio lleno de murmullos’, ¿le ha permitido saldar algunas cuentas con el pasado? -Algunas, porque pude explicar mi desilusión con lo que pasó con la revolución en Nicaragua sin caer en la depresión ni en la pérdida de cualquier esperanza. Aun así, no quería que el libro fuera sobre eso, sino también reflejar los costes personales que se dan en estos casos. Por eso, me pareció interesante hablar de la relación íntima entre la madre y la hija, Valeria y Penélope, protagonistas de esta historia. Y dentro de la ficción, la obra está cargada de sentimientos y episodios que yo viví, aunque no es autobiografía como tal, pero sí es una novela de fantasmas del pasado. -Al igual que Valeria, una de las protagonistas de la novela, se ha visto obligada a venir a vivir a España por motivos políticos. Tanto ella como usted sienten un profundo desengaño por el resultado actual del movimiento revolucionario. ¿Queda vivo algo de esos ideales por los que luchó en su momento? -Por supuesto. He aprendido en la vida que uno no logra sus sueños de una sola vez. A veces, uno lucha por cosas que no necesariamente va a verlas suceder, aunque yo sí pude vivir el triunfo de la revolución en Nicaragua, que fue una experiencia increíble. Pero también un sueño truncado, que fue un desgarramiento muy grande para mí, acompañado en mi caso del exilio y de la pérdida de la nacionalidad. Todo esto no aparece en la novela, pero sí está implícito. Y, como le pasa a Penélope, uno se da cuenta de que todo esa lucha no fue en balde y es consciente de lo importante que hizo su madre. -¿Cree que en todas las familias impera, como dice el título de su novela, un silencio lleno de murmullos digno de ser contado? -Sí, en muchos casos, porque es inevitable. En el caso de las mujeres de la revolución sandinista hay un gran sentimiento de culpa, ya que todo está organizado no para que las mujeres trabajen, sino para que los maridos tengan esposas. El rol femenino, afortunadamente, ha cambiado, aunque el mundo no se ha adaptado del todo y le toca a la mujer y a la madre desempeñar un doble trabajo. -Precisamente, en el libro refleja que a las mujeres se les cuestiona por dedicar más energía a cambiar el mundo que a esos roles predeterminados por el patriarcado. ¿Es fácil vivir con esa doble carga que tiene el género femenino? -Todo lo contrario, es dificilísimo. A nosotras no sólo nos reclama la sociedad cumplir con ciertas obligaciones, sino que lo hacen también nuestros propios hijos e hijas, que por ósmosis social consideran que la madre tiene que estar dedicada en exclusiva a ellos y ellas. -Considerándose un movimiento revolucionario de izquierdas y libertario el que derrocó a Somoza y en el que usted militó, ¿por qué había tantos ramalazos machistas en muchos de sus compañeros? -Jean Paul Sartre tiene una frase que me gusta: «No creo en el revolucionario que es capaz de amar al pueblo, pero no a los seres que tiene más cerca». Eso lo vivimos todas las mujeres que estuvimos involucradas en la revolución. Hubo un tiempo en el que cuando éramos muy necesarias, nos trataban de manera igualitaria, pero cuando se tomó el poder tan sólo hubo una ministra. Siempre daba la sensación de que a las mujeres nos veían con sospecha y, si éramos de armas tomar, nos llamaban conflictivas. En definitiva, nos querían dóciles. -En la novela se refleja también el papel que la mujer ha tenido en diferentes periodos de activismo político en Nicaragua. Usted que siempre ha enarbolado la bandera del feminismo, ¿en qué momento se encuentra el movimiento en su país y en el mundo? ¿Quizá esté involucionando? -Creo que sí hay una involución. El movimiento aunó fuerzas con el ‘Me too’ y otros hechos que lo impulsaron, cuestionando no sólo la vida laboral de las mujeres, sino también las relaciones íntimas y la sexualidad del hombre y de la mujer, algo que ha sido difícil de manejar, sobre todo para los hombres. Me parece que ahora, desde diferentes ámbitos de poder, se hace alarde de una masculinidad agresiva, como se está viendo en el nuevo Gobierno de los Estados Unidos, con Donald Trump a la cabeza, donde se ve el feminismo y la igualdad como un problema. -¿Tiene esperanzas de que el terror del régimen de Daniel Ortega y su mujer, Rosario Murillo, acabe en algún momento y poder regresar a su país? -De momento, no. Desafortunadamente, creo que el régimen en Nicaragua va a terminar muy mal, de una manera muy triste, y alguien le va a pasar la cuenta. Están usando sistemas muy crueles y, por ejemplo, este último mes 200 personas no fueron admitidas de vuelta a su país después de salir fuera, sin renovarles los pasaportes y perdiendo la nacionalidad. Hay una violencia estatal soterrada que es tremenda y le ha arruinado la vida a mucha gente. Ya no hay prensa independiente, a todos los sacerdotes los están hostigando, acaban de cambiar la Constitución y han creado un ejército paramilitar, que es una cosa insólita. -¿Cómo está siendo la respuesta de los lectores a esta novela hispanonicaragüense? -Muy buena. Acabo de estar en Colombia y Costa Rica, donde tuve unas presentaciones con muchísima gente, algo que también he tenido en España. Estaré en abril en Sant Jordi en Barcelona, iré a la Feria del Libro de Buenos Aires, … Además, muchas mujeres me han dicho que se han visto muy representadas con este libro y que les ha servido para conocer lo que ha sucedido en Nicaragua, lo cual me enorgullece. -Ahora vive en nuestro país gracias a la nacionalidad española que le dio el Gobierno de España en 2024. ¿Cómo le han acogido nuestros compatriotas? -Ha sido un proceso bien lindo de reconciliación con España y de encontrar un país donde me siento que pertenezco. Este sentido de pertenencia, aunque he vivido en otros países -Costa Rica, Estados Unidos, …- no lo he tenido en ningún lugar. Me encanta la gente, el ambiente, la cultura, … y todo el mundo me ha acogido con mucho cariño. Me siento agradecida y feliz. Como dice el dicho: «No hay mal que por bien no venga». -En cualquier caso, visto la deriva actual, cada vez es más difícil encontrar un refugio libre de dictadores o autócratas rodeados de iluminados y ricos con ansias de poder. ¿Es usted pesimista o su pensamiento utópico vislumbra una nueva revolución que cambie el mundo? -Creo que vamos a pasar una etapa muy mala y oscura, pero como digo en uno de mis poemas: «Siempre hay luciérnagas». Por eso, no podemos perder la esperanza de que esto se va a voltear, ya que el mundo pasa por ciclos y, aunque este periodo que se avecina se antoja complicado, quiero creer que lo vamos a superar y vamos a poder recuperar una visión más humanista y positiva.
Source link : https://www.abc.es/espana/castilla-la-mancha/toledo/gioconda-belli-organizado-mujeres-trabajen-maridos-esposas-20250220002343-nt.html
Author : (abc)
Publish date : 2025-02-20 23:23:00
Copyright for syndicated content belongs to the linked Source.