Para muchos, el día no comienza hasta que el aroma del café inunda la cocina. Esa primera taza , que calienta las manos y despeja la mente, se ha convertido en un ritual indispensable para millones de personas en todo el mundo. Americano, espresso, cappuccino, latte o cortado, hay variedades para todos los gustos, pero un mismo propósito: activar el cuerpo y la mente al despertar. No es solo una cuestión de placer, sino también de química. La cafeína actúa sobre nuestro sistema nervioso central, mejorando la atención, el ánimo y la sensación de energía . Sin embargo, ¿existe un