Tras un verano muy movido en las oficinas del Real Madrid , repleto de caras nuevas e ilusionantes el equipo dirigido por Scariolo, Chuma Okeke decidió convertirse en el nuevo ojito derecho de la afición blanca durante la victoria ante el Asvel (85-72). La actuación del pívot fue poderosa (17 puntos), una mezcla de despliegue físico y acierto desde la línea de tres que hizo retroceder al valeroso conjunto francés, en clara inferioridad pero capaz de igualar el encuentro gracias al bombardeo orquestado por Jackson (16). Sin embargo, el estadounidense, apoyado por el siempre fiable Tavares, fue suficiente para cerrar