La higiene es algo indispensable para nuestro bienestar físico y mental. Tanto mantenernos aseados a nosotros mismos como al entorno en el que vivimos , hace que nos encontremos mejor de salud y estemos más cómodos en nuestro día a día. Aplicándolo al entorno doméstico, la limpieza de nuestro hogar puede marcar la diferencia en cuanto a nuestro estado de ánimo, por ejemplo, pero también ayuda a que no nos enfermemos en varios ámbitos. Algunos ejemplos serían mantener las encimeras y superficies de la cocina limpias, ya que en ellas posamos la comida y, si están sucias, podríamos contraer bacterias