El apagón general que afectó este lunes a buena parte de España durante prácticamente todo el día tuvo especial impacto en las personas más vulnerables. Los enfermos de esclerosis lateral amiotrófica (ELA) necesitan electricidad para vivir, pues sus máquinas de soporte vital están conectadas a la luz. Si para la población general ya hubo momentos de angustia y tensión, estos se multiplicaron para estos pacientes, que no sabían si iban a llegar vivos al final del día. A los nervios de estar incomunicados y sin saber qué estaba pasando se sumaba el hecho de saber que estaban agotando las baterías