La irrupción de la inteligencia artificial en los procesos de traducción ha supuesto una transformación silenciosa pero profunda en el tejido empresarial. Aunque durante años la traducción fue considerada un servicio auxiliar, casi invisible –solo evidente cuando algo fallaba–, hoy se ha convertido en un elemento estratégico para muchas organizaciones, especialmente aquellas que operan en entornos multilingües y globalizados. «En el ámbito de la traducción profesional , muchas de estas tecnologías no son nuevas. Lo que ha cambiado no es tanto la tecnología, sino el relato que se ha construido en torno a ella», puntualiza Arancha Caballero, fundadora y CEO