La Monumental Plaza de Toros de Aguascalientes vibró como no lo hacía desde la tarde de José Tomás hace una década. Más de 15.000 almas abarrotaron el coso hidrocálido, colgando el cartel de No hay billetes' en un hecho que resonará por años. En el epicentro de este huracán taurino, Andrés Roca Rey, la figura que arrastra multitudes, y Joselito Adame, ídolo local, rubricaron una tarde de triunfo, pasión y defensa de la Fiesta ante los ataques antitaurinos que han sacudido México. El mano a mano entre el peruano y el mexicano no fue solo una corrida: fue un grito