«Concédenos padecer en nuestro cuerpo lo que faltó en tu Cruz», canta un antiguo himno de la tradición cristiana. Este domingo el Papa Francisco hacía llegar su mensaje para el rezo del Ángelus desde su habitación en el Policlínico Gemelli, y se refería a la «bendición» que se esconde dentro de la fragilidad, porque esta condición nos permite aprender aún más a confiar en el Señor, y daba las gracias a Dios «porque me da la oportunidad de compartir en el cuerpo y en el espíritu la condición de tantos enfermo s y personas que sufren». Efectivamente, la forma de